La estancia en Casas Da Moagem fue simplemente maravillosa. Me encantó el ambiente relajado y social en el jardín, donde disfruté de un delicioso desayuno en los días soleados. Además, pude disfrutar de las hermosas playas de Odeceixe, Porto Covo, Vila Nova de Mil Fontes, Zambujeira do Mar y Arrifana, ¡como tener mi propio oasis privado!

El desayuno podría haber sido más variado.

El personal del hostal de Casas Da Moagem fue muy amable y atento durante nuestra estancia. El desayuno, aunque no era muy variado, cumplía correctamente con nuestras expectativas. Nuestra habitación tenía una terraza privada donde pudimos disfrutar de cenas al aire libre y admirar las estrellas por la noche. La tranquilidad del entorno y los paseos por las dehesas de alcornocales al atardecer fueron realmente hermosos. Además, encontramos un restaurante en el pueblo donde cenamos muy bien y a un precio asequible.

No había nada que no me gustara 😊.

La decoración de la casa era encantadora, con muebles antiguos y detalles tradicionales que le daban un ambiente acogedor. Las áreas comunes, como el jardín y la piscina, eran muy bonitas y perfectas para relajarse. Además, el hotel tenía una excelente accesibilidad para personas mayores, con pasillos amplios y sin escaleras que dificultaran el movimiento.

Me hubiera gustado que el hotel ofreciera algún tipo de servicio de asistencia para personas mayores, como personal que estuviera disponible para ayudar en caso de necesidad o alguna facilidad extra en las habitaciones, como barras de apoyo en el baño.

La habitación estaba preparada para recibir personas con movilidad reducida y era bastante amplia, con 22m2. Tenía un suelo de baldosas o mármol y aire acondicionado. Me encantó la tranquilidad que se percibía y me sentí muy cómodo durante mi estancia.

Aunque la habitación tenía buena insonorización, personalmente me faltó algo de vista desde la ventana. Pero entiendo que esto es algo muy subjetivo y quizás a otros huéspedes no les importe tanto.

La casa es increíblemente hermosa, el jardín es simplemente precioso y la piscina es un alivio durante el verano. El personal es absolutamente encantador y el desayuno es delicioso. En general, fue una experiencia genial. El personal fue súper amable y la habitación tenía una terraza privada que era perfecta para disfrutar de cenas bajo las estrellas. Los paseos por las dehesas al atardecer fueron impresionantes y encontramos un restaurante en el pueblo donde la comida era deliciosa y asequible. Para aquellos que buscan paz y tranquilidad lejos del bullicio de la ciudad, este lugar es perfecto. hay hermosas playas cerca.

El personal del hotel fue muy amable. El desayuno era correcto y la habitación tenía una terraza con privacidad. Los paseos por las dehesas al atardecer eran bonitos y las playas estupendas.

Me sentí muy bien, no he tenido ningún inconveniente.

Mi estancia en este hotel fue excelente. Obtuvimos un gran valor por nuestro dinero, ya que la habitación era cómoda y acogedora. La ubicación es perfecta para aquellos que buscan paz y tranquilidad, alejados del ajetreo de la vida cotidiana. El personal del hotel fue extremadamente amable y servicial, siempre dispuesto a hacer nuestra estancia más fácil.

El desayuno podría haber sido más variado. Aunque los productos eran de buena calidad, me hubiera gustado tener más opciones para elegir.